Imprimir esta página
Viernes, 01 Julio 2016 01:56

Con-vivencia 12/24 -Segunda . En Documentos. Seminario de Silvio Lang por Marcio Barceló

Escrito por Marcio Barceló

Marco Teórico:

¿Qué significa lo contemporáneo? de Marten Spangberg  y Geopolítica del rufián en Micropolítca. Cartografía del deseo, de Félix Guattari y Suely Rolnik.

Primer día: realizamos el encuentro en la oficina. Todos con sus computadoras o cuadernos. Silvio expone y propone para este encuentro generar:

●      Red conceptual que nos permitirá pensar la producción creativa/escénica.

●      Condiciones bajos las cuales uno puede decir que se embarca en un proceso creativo- proyecto.

●      A partir de esa red conceptual que abriremos, vamos a asociar con algo que estemos por hacer, proyecto escénico, o algo que ya esté en proceso.

●      Agenda para  exponer y para mostrar. Puede ser una exposición de la problemática que atraviesa el proceso y/o mostrar un ensayo/boceto.

La velocidad de la información que circuló en la exposición me permitió escribir premisas concretas, ya que todo el otro tiempo pensaba sobre lo que escuchaba.

Durante los encuentros estas fueron las líneas de pensamiento y preguntas que me fueron sugeridas por COLABORATORIO ARTÍSTICO.

Dentro de nuestro marco teórico, lo contemporáneo no es precisamente lo reciente. Puede llamarse contemporáneo a aquella subjetividad que produce existencia y está en relación con las epistemologías del presente (saber) y de cómo se ejerce ese conocimiento a través del discurso (poder).

Se puede pensar al Poder como una relación de fuerzas, una circulación de intensidades, un campo de afecciones. Los Poderes son históricos, no eternos (contexto). Por ejemplo podemos hablar sobre el Poder del Saber psicológico del siglo XX.

Hablamos del Saber también como algo histórico. Éste rige ejercicios de determinados Poderes. El saber es un modo de ver y un modo de hablar, es la organización de lo que se escucha, de lo que se dice y lo que se ve.

Creemos que ser contemporáneo implica un modo de subjetividad y de experiencia, con un enfoque metódico donde el Poder se ejerce asociado al Saber. Dicha subjetividad no puede concebirse sin estar regida por saberes y poderes.

Comienza el deseo de ponerme en relación directa y de forma consciente con todos los Poderes/Saberes que me atraviesan. ¿Qué hacer? En principio entender cómo funcionan, comprender que no son trascendencias o esencias, que detrás no hay ningún dios. Son dispositivos, por ejemplo un personaje de teatro tiene sus propios saberes/poderes. Entonces ¿Qué hago en el campo de ensayo? ¿Cuáles son los procedimientos y las condiciones? ¿Mi actitud será la de un artista contemporáneo?.

Los grupos de trabajo también son cuerpos, y reciben afecciones. Son campos de fuerzas. Cuando un cuerpo está afectado y no sabe qué lo incide, debe detenerse a pensarlo. Una ayuda para cartografiar sus deseos. Esos deseos no son aquellos que yo quiero hacer. Lo deseante es una conjunción de cosas, un recorrido que se construye a partir de lo que me afecta. Trazar y desplegar una potencia implica una asociación de ese conjunto de afectos a las fuerzas que me afectan. Lo deseante es esa relación de cuerpos y fuerzas. El deseo está ligado a unir puntos (cartografía) fuerzas y cuerpos. De este modo uno puede programar buenos encuentros, armar una estrategia. El proceso de creación es un proceso de programación de los buenos encuentros, esto aumenta la potencia. Lo que no es un buen encuentro, eso que no aumente mi existencia no es deseo, es impotencia, son pasiones tristes.

Hay una zona fuera del sujeto (en el sujeto) que percibe otras fuerzas que no son las representaciones, categorías y referencias que uno utiliza para adaptarse a las cosas. Una zona de afectividad fuera del sujeto (cuerpo vibrátil). Una zona de percepción donde aparece una ética en relación a la alteridad (el otro). El derecho a lo que no existe, la creación de un proceso de subjetivación.

Nadie sabe lo que puede un cuerpo. Lo que hay de singular son las estrategias. Qué hace uno, cómo se organiza un cuerpo con aquello que se afecta. Modos, sustancia infinita. Una modalidad estética, inventiva, creativa. Esa invención es lo que no se sabe de un cuerpo. Lo singular está en la práctica. Uno cree que trabaja con su biografía, pero en verdad está trabajando con las fuerzas del mundo. Los artistas como legisladores del espacio tiempo tenemos todo para ganar, podemos impugnar y luego crear.

---

Micro-política: ¿En qué uso mi tiempo?

El neoliberalismo como capitalismo mundial integrado (globalización). El neoliberalismo propone ser empresario de uno mismo. La auto-esclavitud. Nuestra personalidad como un diseño de vida, como una marca (símil huella) que inmortaliza.

El diseño como sustitución de dios, lo que antes era dios hoy es el diseño.

Lo binario sucede como resistencia. Si hay saber, hay contrasaber, si hay poder, lo hay contrapoder y si hay subjetividades, las hay también en fuga.

El poder se interesa por la Micropolítica, busca el orden del tiempo, el espacio los vínculos y los deseos.

¿El capitalismo se ha apropiado de ello? ¿Qué hay más allá del poder?

Lo que desestabiliza y te lleva al límite es la subjetivación de las afecciones (Cuerpo/fuerza). El modo de subjetivación disidente es el Deseo y el vitalismo de permanecer en la existencia. Conatus, ese apetito del querer vivir.

Las Afecciónes son fuerzas invisibles, inaudibles, inconceptualisables. No se cómo me va a afectar, no puedo controlarlo. El cuerpo no está avisado y no está preparado para saber cómo va a afectar eso. Fuerzas que desestabilizan, dan malestar, producen hastío, pánico, depresión. “¡Estoy harto de esta vida que me hacen vivir!”.

Entiendo, en fin, que si una fuerza afecta mi existencia es que  hay algo para pensar, entonces a partir de ese momento hay algo para hacer.

--

Debido a la gran cantidad de afecciones que entregamos las diferentes subjetividades que conformamos el Colaboratorio, veo la necesidad de seleccionar lo que para mi fue un gran desestabilizante de la normalización del trabajo artístico.

Puedo dividir el Colaboratorio en tres gruesos momentos: uno primero que generó vocabulario e imaginario indispensable para encarar una lectura particular de cada proceso creativo, otro segundo que implicaba una oratoria sobre en qué  circunstancia emergió el proyecto en el que estoy trabajando, en qué instancia se encuentra ahora y cuál es la terminación que estoy ideando para tal.

Encuentro en las siguientes preguntas que fueron sucediendo en respuesta de cada trabajo particular, una síntesis de cabecera para verificar (en general) un próximo proceso creativo:

¿Cómo realizar un cuerpo sin órganos? | ¿Cómo desorganizo mi sujeto especulativo? ¿Qué pasa afectivamente con eso? | ¿Cómo me relaciono con las disciplinas con las que estoy trabajando? | ¿Cómo nombro lo sensible? ¿Cómo hablo de las fuerzas? | ¿Cómo hacer lazos? | ¿Cuál es la estrategia para hacer este trabajo? ¿Cuál es el contexto? ¿De dónde viene y como es hoy? ¿Dónde está la emancipación? ¿Cuáles son sus conjuntos de afectos? | ¿Cómo uno es fiel a eso que se propone? | ¿Qué representa la disciplina en la que trabajo? ¿Hay obligación representacional para que sea una obra de tal disciplina? ¿Cuál es la crítica de a esa representación? | ¿Por qué no doy una experiencia a una afección? ¿Cuál es la experiencia corporal, kinetica, física de esa afección? | ¿Por qué no hay una coherencia afectiva por lo que estoy haciendo? ¿Por qué finjo lo que hago? ¿Hay un adentro y un afuera? | ¿Cómo pensamos lo que pensamos? ¿Con qué ideas sostenemos nuestra existencia creativa? ¿Con qué ideas, técnicas y categorías uno está trabajando? ¿Cuál va a ser la relación entre las contradicciones y diferencias que hay entre los participantes de la creación? | ¿Cómo cartografiar el mapa que ya hay de la tradición de la disciplina con las que estoy trabajando? ¿Qué relación tiene esta práctica con lo que se está construyendo actualmente? | ¿Cuál es el dispositivo escénico que te permite reunir y desplegar tus prácticas? | ¿Cómo escenificar la gramática? | ¿Cuál es el lugar de anudamiento? ¿Cómo sircunscribo eso? | ¿Qué género estoy trabajando? | ¿Por dónde debo comenzar a organizar un proyecto? ¿Qué debo definir? ¿Cómo organizo mi trabajo? ¿Cómo planifico un proyecto? ¿Dónde va el dinero? ¿Tiene relación con lo que estoy pensando? | ¿Cómo Uso el espacio, la mirada, el vestuario, los cuerpos…? ¿Qué pragmática utilizo? ¿Cuál es el sistema de los cuerpos, musicales, lumínicos, actorales etc…? | ¿Cómo articulo los procedimientos de la lógica de existencia? ¿Cómo afectan los procedimientos los cuerpos?

--

Trayendo esta experiencia a mi propia creación artística, no tengo más que ponerme a trabajar. Durante la semana de encuentro en el Colaboratorio, no solo pude crear lazos afectivos entre los integrantes del mismo, sino que además pude actualizar, repensar, verificar, desnaturalizar, descontracturar, develar y en fin ponerme a trabajar con las fuerzas que atraviesan mi proceso creativo. Pude tocar esas afecciones que me inciden y es ahora que creo estar nuevamente trabajando en lo que deseo.

Vuelvo al campo de ensayo desde el deseo y con nuevas responsabilidades. Con nuevos saberes/poderes, por lo tanto desde una nueva subjetividad. Deseo ensayar.

----

Este texto fue realizado para el Seminario ”Colaboratorio artístico” " coordinado por Silvio Lang realizado la semana del 13 al 17 de Junio de 2016 en La Fábrica Escénica, en el marco de Convivencia Segunda y 12/24.

Registro Fotográfico:  Guadalupe Arriegue y Tasio Rossi