Por primera vez escucho a Los Redondos en el Teatro San Martín. Veo a Celia Argüello, a Luli García Pullés, a Martín Gil y descubro a varias bombas más, que me gustaría ver más seguido en los escenarios públicos de la danza de mi ciudad, sobre todo en los de la calle Corrientes: uno cerrado hace más de tres años y el otro, el más grande, sede de un ballet contemporáneo dirigido hace 18 años por el mismo coreógrafo. La mayoría de los intérpretes de El baile son coreógrafos también. foto de Christophe Martin Yo que era un solitario bailando… Sus cuerpos explotan cuando bailan murga, cuando cantan boleros y gritan Miss Bolivia, o zapatean en una audición de malambo. La obra franco-argentina abre mostrando lo que sucede en un salón de baile: la gente se mira, de reojo, espera, se saca a bailar. Y se pasea por otros espacios también, a diferencia de la película de Scola de 1983, del mismo nombre, porque acá (y allá), también se baila en plazas, boliches, en la calle, los pueblos, hasta entre…